
La increíble vuelta al mundo de Sjaak con la Yamaha YZF R1
Muchos aventureros ya han dado la vuelta al mundo en motocicleta, generalmente con motocicletas de tipo trail o discurriendo en la mayoría del viaje por vías asfaltadas. Pero hacerlo a bordo de una Yamaha YZF R1 ’01 y atravesando toda clase de terrenos como desiertos, páramos helados o caminos por la jungla sí es una aventura excepcional.
El holandés Sjaak Lucassen es un apasionado de las motocicletas y los coches, jardinero de profesión y con un negocio propio de explotación agrícola. Un buen día decidió tomarse un descanso y realizar un viaje en motocicleta. Esto le llevó a organizar otros viajes más largos y finalmente buscar patrocinios para una gran aventura en moto.
Esta gran aventura fue su primera vuelta al mundo en motocicleta, que le hizo recorrer 160.000 km por 40 países distintos. Pero no fue suficiente para él y volvió a reunir fondos suficientes para embarcarse en otro viaje alrededor del mundo más completo y extenso.
Para este nuevo viaje, la filial de Yamaha en Holanda le regaló una nueva y flamante Yamaha YZF R1 2001 roja/blanca que fue rápidamente modificada y adaptada para su viaje por el propio Sjaak.
Las principales modificaciones fueron reforzar el subchasis para soportar el peso de un gran cajón central y dos maletas laterales de aluminio, un juego de luces traseras nuevas, un nuevo sistema eléctrico adaptado a las nuevas necesidades de la motocicleta, tapar la cadena y la corona trasera para mantenerlas lo más limpias posibles al circular fuera del asfalto, un sistema de engrase automático para la cadena, soportes extras para el depósito de gasolina y los espejos retrovisores, un silencioso de escape más corto, un amortiguador de dirección, tomas de corriente de 12 V y de USB, una alarma y un sistema Fuelstar en la línea de combustible que añade estaño a la gasolina lubrificando más las válvulas y permitiendo el uso de gasolina de bajo octanaje.
Sjaak comenzó su viaje saliendo desde el stand de Yamaha en el Salón del motor Utrecht el 4 de marzo del 2001 y durante más de 5 años recorrió más de 250.000 km por 77 países en los cinco continentes. Su viaje terminó en la localidad de Schiphol-Rijk de su Holanda natal un 5 de agosto del año 2006.
Muchas fueron las incidencias en su viaje, principalmente pinchazos de ruedas y diversas reparaciones de más o menos gravedad por golpes o caídas, destacando un cambio de cárter motor, un cambio de amortiguador trasero a mitad del viaje y tener que reforzar diversas partes del chasis por el esfuerzo extremo al circular por toda clase de caminos, algunos de ellos casi impracticables.
Pero sobre todo hay que destacar la fiabilidad a toda prueba de la Yamaha YZF R1, que solo necesitó las revisiones necesarias con los kilómetros para su correcto funcionamiento, así como diversas limpiezas de algunos de sus componentes por la suciedad, polvo, barro y otros elementos que se acumulaban en su interior.
Durante los más de 250.000 km en los que la YZF R1 atravesó puertos de montaña, ríos, selvas, desiertos y toda clase de vías más o menos asfaltadas nunca obligó a parar a Sjaak por problemas mecánicos que no fueran por caídas o golpes, acabando el viaje con todos los elementos originales de su motor.
La vuelta al mundo de Sjaak sin duda fue una extraordinaria aventura que puso al límite la Yamaha YZF R1 demostrando su fiabilidad y alta calidad de sus componentes. Una demostración más del buen hacer de Yamaha y de su liderato a nivel mundial como fabricante de motocicletas y scooters.